Barcelona, 6 de mayo de 2021. El fondo ICF Capital Expansión II ha invertido 1 millón de euros en Classpack, empresa precursora en la fabricación y comercialización de soluciones de embalaje 100 % biobasado y de maquinaria ecoeficiente, diseñada ad-hoc para automatizar el proceso de ensacado y racionalizar la utilización de envases de un solo uso en el sector primario.

La inversión, realizada vía ampliación de capital, permitirá ampliar la capacidad productiva del centro productivo situado en Cabrera de Mar (Barcelona) e impulsar su negocio.

La empresa catalana nace en 2019 con una estrategia centrada en un punto clave: ofrecer envases 100 % biobasados garantizando el origen sostenible y la composición 100 % orgánica de las materias primas y la eliminación de anexos, como cola o grapas, para conformar el producto acabado biobasado mediante una tecnología propia y patentada.

Actualmente la compañía ofrece a distribuidores del sector primario y de la alimentación, tanto internacionales como nacionales, dos grandes tipologías de envases. Por un lado, una amplia gama de productos listos para envasar, diseñados de acuerdo con las necesidades del cliente, y, por otro, bobinas de material 100 % biobasado en distintos formatos para los clientes que disponen de la máquina de envasado de Classpack. Se trata de una maquinaria con tecnología patentada y diseñada internamente por la empresa que permite al cliente final automatizar y personalizar el envasado, con una eficiencia muy relevante en consumo eléctrico y reducción de ruido.

Juan Carlos de Clascá, propietario y director de Classpack, explica que «conscientes de la problemática en el sector del embalaje de plástico y de todo el resto de componentes asociados nocivos para el medioambiente, desarrollamos esta solución plastic free para contribuir a crear una sociedad más sostenible. Todo esto sin perder la trazabilidad de los productos, garantizando en todo momento la seguridad alimentaria y el cumplimiento de la normativa de etiquetado».

«Actualmente estamos aportando una solución pionera a los distribuidores del sector primario, ya que en junio de este año entra en vigor la normativa europea que recoge la necesidad de eliminar los envases de un solo uso, así como los materiales de producción de envases con componentes de origen fósil (polímero de origen petróleo), nocivos para el medioambiente, y que conllevará sanciones muy importantes», explica de Clascá.

Adrià Torrelles, director de ICF Capital Expansión, destaca que «se trata de un producto sin huella ambiental, uno de los requisitos más demandados por los consumidores, y con el que el ICF está completamente alineado de acuerdo con nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030 de las Naciones Unidas».

El producto de Classpack tiene un impacto directo en el coste de gestión de los residuos. Al ser 100 % biobasado, se puede compostar en el compostador doméstico o tirarse al contenedor orgánico que gestionan los ayuntamientos, el coste del cual está incluido en la tasa de recogida de residuos municipales.