Las personas son el motor que hace posible nuestra misión

Las personas que integran la plantilla del ICF son el motor que hace posible nuestra misión como banca pública de promoción de la Generalitat de Catalunya.

Por ello, su actividad debe regirse por valores, principios éticos y normas como la profesionalidad, la transparencia, la honestidad y la integridad, así como por el rechazo a cualquier discriminación y un firme compromiso con la igualdad de oportunidades.

El ICF vela para garantizar un entorno laboral de calidad, así como para potenciar el desarrollo del talento y las carreras del conjunto de profesionales que cada día contribuyen, con su ocupación, al impulso del tejido empresarial y social catalán.

Igualdad de oportunidades

La igualdad de oportunidades es una de las máximas prioridades del ICF. Por ello, complementamos las normas y los principios recogidos en el Código de Conducta con un plan de igualdad que materializa los compromisos del ICF con la igualdad real y efectiva.

El Plan de Igualdad del ICF traza una estrategia para asegurar un entorno laboral libre de discriminación a través de formaciones internas en materia de igualdad y prevención del acoso, actos e iniciativas de sensibilización sobre las discriminaciones a causa de género, orientación sexual o cualquier otra condición y medidas que favorecen la conciliación laboral, entre otras acciones.

Desarrollo humano y profesional

Para contribuir al desarrollo humano y profesional de las personas que integran el equipo del ICF, nuestro plan de formación prevé formaciones para que nuestra plantilla:

se adapte a los nuevos entornos digitales
esté al día de la normativa y la regulación de las entidades de crédito
adquiera nuevas competencias
trabaje con nuevas herramientas y programas para ofrecer el mejor servicio y la mejor atención posible

Código de Conducta

El Código de Conducta recoge el conjunto de valores, principios éticos y normas de conducta que deben regir e inspirar la actividad profesional del Grupo ICF.

Es de aplicación y obligado conocimiento y cumplimiento por parte de todos los trabajadores, directivos y miembros de los órganos de gobierno de las entidades que conforman el Grupo ICF, o que actúan en su representación.

Los profesionales del ICF deben actuar con integridad profesional, de acuerdo con el principio de transparencia y de manera lícita, ética y leal en el desarrollo de sus funciones, manteniendo siempre la confidencialidad de la información relativa a los clientes.

Por otro lado, el Código de Conducta prohíbe cualquier conducta discriminatoria y recoge el compromiso del ICF con el medio ambiente.